LA VERDADERA HISTORIA DE CLARA CAMPOAMOR
Fernando Alonso Barahona
CLARA CAMPOAMOR ( 1888-1972 )
«Creo que lo único que ha quedado de la República fue lo que hice yo: el voto femenino»
Yo, señores diputados, me siento ciudadano antes que mujer, y considero que sería un profundo error político dejar a la mujer al margen de ese derecho, a la mujer que espera y confía en vosotros; a la mujer que, como ocurrió con otras fuerzas nuevas en la revolución francesa, será indiscutiblemente una nueva fuerza que se incorpora al derecho y no hay sino que empujarla a que siga su camino. No dejéis a la mujer que, si es regresiva, piense que su esperanza estuvo en la dictadura; no dejéis a la mujer que piense, si es avanzada, que su esperanza de igualdad está en el comunismo. No cometáis, señores diputados, ese error político de gravísimas consecuencias. Salváis a la República, ayudáis a la República atrayéndoos y sumándoos esa fuerza que espera ansiosa el momento de su redención
CLARA CAMPOAMOR
“Creo que no es el momento de otorgar el voto a la mujer española. Lo dice una mujer que, en el momento crítico de decirlo, renuncia a un ideal. Quiero significar a la Cámara que el hecho de que dos mujeres se encuentren aquí reunidas opinen de manera diferente, no significa absolutamente nada, porque dentro de los mismos partidos y de las mismas ideologías, hay opiniones diferentes (…). En este momento vamos a dar o negar el voto a más de la mitad de los individuos españoles y es preciso que las personas que sienten el fervor republicano, el fervor democrático y liberal republicano, nos levantemos aquí para decir: es necesario, aplazar el voto femenino (…). Señores diputados, no es cuestión de capacidad; es cuestión de oportunidad para la República (…). Pero hoy, señores diputados, es peligroso conceder el voto a la mujer”. Ella consideraba que, influidas por la Iglesia, las mujeres votarían en contra de la República.
VICTORIA KENT
«Al principio se persiguió a los elementos fascistas. Luego la distinción se hizo borrosa. Se detenía y se fusilaba a personas pertenecientes a la derecha, luego a simpatizantes, más tarde a los miembros del partido radical de Lerroux, y luego –error trágico o venganza de clase- se incluyó a personas de izquierda republicana como el infeliz director de un colegio para muchachos, el Sr. Susaeta, hijo de un ex-diputado radical socialista… Cuando se comprobaron aquellos errores, se echaba la culpa de los asesinatos a los fascistas y se continuaba.»
CLARA CAMPOAMOR
La revolución española vista por una republicana
( Clara Campoamor )
Las diversas mentiras y manipulaciones históricas que conforman esa auténtico intento de policía del pensamiento que es la llamada “ memoria histórica “ – con la lamentable participación de historiadores convencionales y comunistas de diverso pelaje – no pueden ocultar la verdad de los hechos . Que alguien como la ministro Irene Montero se quiera declarar heredera de una mujer tan opuesta a ella – en ideas, formación, bagaje cultural y personalidad – como Clara Campoamor, es un sarcasmo y una ofensa más a la verdadera memoria de la historia, que nada tiene que ver con la liberticida» memoria histórica » de la extrema izquierda .
La historia ha de buscar la verdad, o al menos los diferentes prismas de la verdad , dejando a un lado las ideologías y los sectarismo .
En ese 14 de abril de 1931 iniciado con esperanzas y pronto repudiado por sus ilustres fundadores : Ortega y Gasset , Gregorio Marañón, Pérez de Ayala . merece la pena recordar la verdadera figura de una mujer ilustre : Clara Campoamor .
I- LA VIDA
Clara Campoamor nace en el barrio madrileño de Maravillas el doce de febrero de 1888, en una familia de origen humilde. Su madre era modista y su padre, contable de un periódico . Tras fallecer su progenitor se ve obligada a interrumpir sus estudios y ponerse a trabajar y lo hace en el cuerpo de Correos y Telégrafos en 1909.
En 1914 y tras sacar el número uno de su oposición, se convierte en profesora de mujeres adultas en el Ministerio de Instrucción Pública. En 1923 participa en un ciclo sobre Feminismo organizado por la Juventud Universitaria Femenina donde comienza a desarrollar sus ideario sobre el derecho a la igualdad de las mujeres.
En 1924 y a la edad de treinta y seis años se licencia en Derecho lo que le permite defender dos casos de divorcio muy célebres en aquella época, el de la escritora Concha Espina, de su marido Ramón de la Serna y Cueto, y el de Josefina Blanco, de Valle-Inclán. Ambos muy difíciles y sonados que se convirtieron en sendos éxitos jurídicos para la abogada .
Tras la dictadura de Primo de Rivera , entra a formar parte del Partido Radical y se presenta a las elecciones de 1931 para las Cortes Constituyentes de la Segunda República, obteniendo un escaño como diputada por Madrid.
Participa en la comisión encargada de redactar la Carta Magna republicana, siendo la primera mujer que habla en las Cortes Españolas ( septiembre 1931 )
Desde su tribuna ejercerá la defensa del sufragio femenino en España, con la oposición de sus propios compañeros de partido y de otra diputada socialista (Partido Republicano Radical Socialista ) , Victoria Kent, convertida en la portavoz del “no”.
Victoria Kent se opone al derecho electoral de las mujeres, argumentando que éstas influidas por la Iglesia, votarán conservador. Exactamente lo mismo pasaría pocos años después en Argentina donde el voto femenino fue introducido por el Gobierno de Perón ( con Evita como gran artífice ) teniendo en contra al feminismo de entonces (Victoria Ocampo por ejemplo ) que temía el arrollador triunfo de Perón en las siguientes elecciones . Así sucedió .
Al final, y con una apretada victoria impone sus tesis y entra en la Historia como la principal artífice de la inclusión del voto femenino en España, recogido en la Constitución de 1931, que en su artículo 36 dispone que “Los ciudadanos de uno y otro sexo, mayores de 23 años tendrán los mismos derechos electorales conforme determinen las leyes”.
En las elecciones de 1933, la CEDA se proclama vencedora y toda la izquierda culpa de su derrota a Clara Campoamor. Es su muerte política . Las elecciones de 1936 ( en las que la izquierda extremista perpetraría un autentico golpe de Estado manipulando actas y procurando un resultado electoral que los análisis contemporáneos han demostrado falso ) certificaron la muerte de la democracia aún en estado balbuciente . Ya Largo Caballero había anunciado que no respetaría resultados que fueran en contra de sus “ intereses populares “ , y Salvador de Madariaga – más tarde – reprocharía a esa izquierda que expulsó a sus mejores hombres (Besteiro ) haber perdido hasta el ultimo ápice para condenar el Alzamiento de 1936 después de que ellos mismos protagonizaran en octubre de 1934 un sangriento golpe contra la legalidad republicana .
https://www.ivoox.com/clara-campoamor-tiempos-modernos-audios-mp3_rf_31908538_1.html
2- GUERRA Y EXILIO . CLARA CAMPOAMOR FUE MODERADA
Me molesta que se ponga en el mismo plano a una mujer de la categoría humana de Clara Campoamor con una Margarita Nelken que, desde su tribuna del diario Claridad, pedía a sus esbirros que violaran a las mujeres de derechas. Nelken era femicida, no feminista, era un Robespierre con faldas, LUIS ESPAÑOL BOUCHE , historiador
Cuando en 1936 estallaba la Guerra Civil Española, el exilio fue el camino de muchos, entre ellos, el de Clara. Primero en Lausana y después en Buenos Aires, buscó en varias ocasiones la manera de volver a su patria. Clara estaba políticamente hundida desde 1933 porque le habían responsabilizado de la derrota de las izquierdas en las elecciones ganadas por la CEDA .
Con mucho esfuerzo termina de escribir, El voto femenino y yo, mi pecado mortal, contando todo el proceso por el que pudo conseguir el voto femenino.
El libro siguiente fue aún más arriesgado . En sus páginas analizaba la degradación del régimen republicano a través de la situación vivida en Madrid durante los primeros meses de la Guerra Civil (La revolución española vista por una republicana), publicado en Francia en 1937, no pudo ver la luz hasta que el historiador Luis Español Bouché dio con él en 1999 y lo publico en 2005.
Clara contempla con preocupación las huelgas las manifestaciones el ambiente enrarecido y se horroriza con el asesinato de Calvo Sotelo a manos de guardias de Asalto . La antigua diputada es testigo de las tremendas matanzas en el Madrid republicano una vez que fracasa la rebelión del Cuartel de la Montaña y son masacrados todos sus defensores . Las chekas , la terrible represión desencadenada contra todos los desafectos. Es lo que llevó a Marañón a llamar (En el ensayo La revolución nacional ) “ escarabajos “ al bando que había destruido en verdad la República llevándola al abismo del comunismo y la tiranía o a Ortega a contar en el prólogo a ingleses de La rebelion de las masas como los comunistas ordenaban a punta de pistola las firmas en manifiestos a favor de la República . Es Unamuno siendo cesado como Rector de la Universidad de Salamanca por el gobierno de la República . Es – sin duda – el grito desesperado de media España – llegó a decir Gil Robles – que no se resignaría a morir .
Ante todo esto, Clara Campoamor perdió toda esperanza por volver a la situación anterior. La violencia con la que se desarrollaba la guerra en retaguardia había destrozado el ímpetu con el que la madrileña había luchado por una República al servicio de todos los españoles, una que convenciera y acogiera desde el más comprometido al mayor agnóstico del proyecto de 1931. Las propias presiones que recibió desde la izquierda radical hicieron que Clara tuviera que exiliarse a París. Desconsolada, dolida y despreciada comenzó a escribir en 1937 el diario donde escribe : Se vislumbra con demasiada claridad que el triunfo del Gobierno no será el triunfo de un régimen democrático”, sino el triunfo de los “extremistas”; con dos únicos resultados posibles: “Se disputarían el poder y la gloria de instaurar en el país regímenes opuestos: el comunismo bolchevique o el libertarianismo anarquista”.
De París pasó a Italia donde fue detenida por una denuncia anónima durante su viaje – y posteriormente puesta en libertad a las pocas horas de presentarse en comisaría – y por fin logró establecerse en Suiza . Regreso varias veces a España sin ser molestada ,pero no se pudo quedar porque medios del gobierno español querían que denunciara a antiguos miembros de la masonería.
Para el historiador Luis Español Bouche Clara es “la antítesis de todas las feministas de salón que hemos tenido en España”.
Clara Campoamor terminó sus días en Lausana, donde moría de cáncer el 30 de abril de 1972. Tenía 84 años. Sus restos fueron trasladados a San Sebastián.
Su vida y su legado ha sido desde entonces recordado como el de una mujer valiente y luchadora que no dudó en dedicar todos sus esfuerzos en defender la causa en la que ella creía fervientemente
El libro en el que analizaba la degradación del régimen republicano a través de la situación vivida en Madrid durante los primeros meses de la Guerra Civil (La revolución española vista por una republicana) :
–Título: La revolución española vista por una republicana
–Autor: Clara Campoamor – Traducción, introducción y listado de personajes por Luis Español Bouché
–Editorial: Espuela de Plata (2011)
–Precio: 14,25€
–ISBN: 9788415177142
Con su esfuerzo, sumado al trabajo que ya hicieran las biógrafas Concha Fagoaga se puede intentar que la figura de Clara Campoamor ocupe el lugar que le corresponde en un presente que le debe mucho y un futuro que se ha de construir a través de ejemplos como el suyo.
Una España brillante y a veces tergiversada , unos hombres como Ortega y Gasset, Marañón, Miguel de Unamuno, Pío Baroja , Azorín, Benavente , Salvador Dalí y tantos otros intelectuales y artistas que abominaron de los excesos y la deriva extremista de la Segunda República hoy absurdamente idealizada por algunos . Clara Campoamor pertenece por derecho propio a esa nómina de españoles libres e independientes que merece la pena releer y admirar .
1 comentario. Dejar nuevo
Gran mujer valiente y luchadora